La nueva factura de la luz ya está en marcha. El pasado 1 de julio
era el plazo dado a los comercializadores de electricidad para que
adaptaran los recibos a la nueva metodología de cálculo, que había
entrado en vigor anteriormente, el 1 de abril. Entre los reproches al
nuevo marco, se ha criticado la complejidad del sistema de precios y la
dificultad que tendrán los consumidores, al menos en una primera fase
antes de que se instalen definitivamente contadores electrónicos, para
poder desgranar la factura.
De ahí que la Comisión Nacional de los Mercados y Competencia haya puesto en marcha un simulador de precios
que permite al usuario comprobar si el importe de la factura se ajusta a
la nueva regulación. En caso de que el resultado del simulador no
coincida con el de la factura recibida por el cliente, el usuario debe
dirigirse al teléfono de contacto de su comercializadora que aparece en
su factura, según señalan desde la CNMC.
¿Qué consumidores pueden consultar?
La herramienta permite simular la factura de determinados consumidores que cumplan estas condiciones:
- Potencia contratada menor o igual a 10kW,
- Tengan el contrato con un comercializador de referencia. El nombre
de la empresa suministradora que aparece en la factura debe coincidir
exactamente con el nombre una comercializadora de referencia (no es
suficiente con que sea una empresa del mismo grupo). Las
comercializadoras de referencia son: E.ON Comercializadora de Último
Recurso, S.L; Iberdrola Comercialización de Último Recurso, S.A.U.
Endesa Energía XXI, S.L.U.; Gas Natural S.U.R. SDG, S.A. y EDP
Comercializadora de Último Recurso, S.A.
- Para usar el simulador los clientes
deben estar acogidos al precio voluntario para el pequeño consumidor,
esto es, que no hayan optado por la oferta alternativa a precio fijo.
Los nuevos precios se aplican a los consumidores de electricidad con
potencia contratada inferior o igual a 10 kW y que tengan su suministro
con uno de los comercializadores de referencia. El nuevo sistema vincula
el coste de la energía, que supone alrededor de un tercio del importe
del recibo de la luz, a la evolución del mercado mayorista en función de
unos perfiles de consumo.
¿Qué datos son necesarios?
Para utilizar la herramienta, el consumidor debe tener a mano los siguientes datos de la factura:
- fechas inicial y final de lectura,
- potencia y el peaje de acceso contratados,
- consumo registrado en el periodo y, en su caso, si es beneficiario del bono social.
- Otros datos como el importe correspondiente al alquiler del equipo de medida y el lugar donde se produce el suministro.
- Importes correspondientes a las regularizaciones del primer y segundo trimestre de 2014.
¿Cómo reclamar si no estoy conforme con la factura?
En caso de que el resultado del simulador no coincida con la factura recibida, el consumidor puede presentar una reclamación.
- En primer lugar, se tendrá que dirigir al servicio de atención al cliente de su comercializador.
- Si las explicaciones no convencen al usuario, éste puede reclamar
ante el organismo competente en materia de energía de su comunidad
autónoma.
- Además, también hay la posibilidad de acudir al sistema arbitral de consumo.
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