Grandes, pequeñas; abiertas, cerradas; de diseño, clásicas; en altura, a ras de suelo; de un nivel, de varios; con vegetación natural, con plantas artificiales... Son las terrazas. Desde pequeños balcones a grandes azoteas.
Unos espacios que marcan la diferencia entre viviendas y que cotizan muy al alza en el mercado inmobiliario del cielo de Madrid.Fernando Pozuelo, experto profesional en darles vida, pone de relieve, este mundo desde su lado más espectacular y cuidado con la llegada del calor. "Es un espacio especial concebido para disfrutar, dar un respiro a la vivienda y ser un alivio para el propietario". Partiendo de esta visión, Pozuelo afirma que existen infinidad de tipologías, "tantas como sean capaces de imaginar los arquitectos y paisajistas".
El ingeniero paisajista, que ha diseñado terrazas desde tan sólo dos metros cuadrados (balcones) a 1.500 (azoteas), niega el tópico de que sean sólo para el verano -"se pueden disfrutar todo el año"- y tiene muy claro cuáles son las mejores: las céntricas, las más elevadas y las de mayor superficie que combinen vistas y privacidad. "Las cumbres de los edificios son, evidentemente, las que mayor potencial, pero una pequeña también puede decir mucho". Este preciado elemento arquitectónico, que se limita a unos millares en Madrid -excluyendo balcones-, juega un papel muy relevante en el mercado inmobiliario que se ha potenciado, aún más, con la crisis del sector. "Un piso con terraza bien acondicionada puede costar, fácilmente, un 10% o 12% más que una vivienda idéntica sin terraza", apunta Pozuelo, testigo en primera personal de múltiples compraventas.
Pero además de representar un claro factor de encarecimiento, las terrazas son un trampolín de las casas para salir del mercado y un detonante que sirve para que se caiga el cartel del Se vende. El propio Pozuelo apunta que dos propiedades donde ha realizado sus últimos trabajos encontraron comprador en menos de un mes desde la puesta de largo de su renovada terraza.
Estos 'pulmones' de los pisos pueden albergar todo tipo de elementos y materiales e incluso piscinas de diversas dimensiones dependiendo de su tamaño. "La solución más adecuada para éstas sería una mezcla equilibrada y original entre las paredes, suelos, macetas, jardineras, iluminación, cerramientos de cristal, mobiliario, láminas de agua, fuentes y pérgolas", indica Pozuelo.
El paisajista admite que disponer de estas zonas, en su vertiente exclusiva, es un "privilegio" al alcance de "propietarios con poder adquisitivo medio alto que desean tener un respiro cada día, equiparable a unas minivacaciones cuando se llega del trabajo a casa". Pero no todas son de alto 'standing'. Este profesional ha realizado proyectos en terrazas desde 500 euros a decenas de miles.
Entre las más modestas, evidentemente, no se encuentra uno de sus trabajos más espectaculares: las azoteas de un palacio árabe en Málaga. A buen seguro, el presupuesto de esta obra supera de largo la inversión media que hacen sus clientes. "Las tarifas son muy variables dependiendo de los materiales y elementos, pero el coste de inventar una terraza de 20 metros va de 9.000 a 18.000 euros", calcula.
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