Casi todo el mundo utiliza algunos pequeños trucos para ahorrarse unos euros en su día a día. Vida Low Cost vuelve a abrir sus puertas a los consumidores para, en esta ocasión, recibir algunos de esos consejos que nos ayuden a adelgazar el número de gastos mensual. Xavi Barquín, autor del blog Yonolotiratía, nos da una pequeña lección sobre lo útil que es pensar dos veces en la utilidad de los viejos artículos antes de optar por la basura. Toma nota.
Que vivimos en una sociedad donde cada día se ve mermado el poder adquisitivo es algo que no se le escapa a nadie. Subidas de impuestos, recortes de sueldos, tasa de paro en aumento... es en estas situaciones cuando la necesidad agudiza el ingenio.
Estamos en tiempos de obsolencia programada, muebles empaquetados por unos pocos euros, bazares chinos llenos de objetos decorativos, y es por eso que cada día van al trastero o a la basura montañas de objetos que se han roto o simplemente nos hemos cansado de ver. Es ahí cuando entramos en juego los "tuneadores".
En mi caso todo empezó cuando con 20 años, un sueldo mileurista y un matrimonio hipotecado con el banco, te plantas ante tu primer hogar: el pánico te asalta. ¿Y ahora qué hago? ¿De dónde saco el dinero para amueblar, decorar y los electrodomésticos? , y al día siguiente apareció una montaña de muebles junto a un contenedor de basuras. En mi blog Yonolotiratía explico cómo empecé a "tunear" muebles y me enganchó.
A día de hoy no puedo evitar fijarme en todo lo que la gente deja (ya no digo "tira") junto a los contenedores, y me sorprendo a mí mismo cargando trastos en mi coche buscando una segunda vida para un mueble de muchísima mejor calidad que seguramente tendrá su sustituto.
La cosa va más allá que tratar un mueble para la carcoma y pintar o empapelar. Se le puede dar nuevos usos, adaptándolo a tu hogar, modificando y personalizando al máximo logrando una pieza única y original.
Hay millones de páginas por internet donde se explica cómo reciclar piezas y es un trabajo a veces duro, pero siempre agradecido y reconfortante. Además de muebles se puede hacer de todo reciclando, centros de mesa, cortinas, cojines... ¡todo sirve para un tuneador!
Por todo eso y por más, recomiendo a la gente que no abandone sus objetos, siempre se puede encontrar a alguien que les dé un nuevo aire contribuyendo a evitar el consumismo innecesario.
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