Los robos con fuerza en viviendas han bajado. En el primer trimestre
del año se registraron 27.539, un 15,9% menos que en el mismo trimestre
del año anterior (32.762), según el Balance de Criminalidad del Ministerio de Interior. Pero que nadie baje la guardia, porque en pocas semanas se abre la veda. En los meses de verano suelen aumentar los robos y saqueos
en las viviendas. Los amantes de lo ajeno aprovechan para desvalijar
pisos y chalés mientras sus dueños se ausentan durante el periodo de
vacaciones. Hay que ponérselo difícil y no siempre vale con aplicar el
sentido común. Reforzar puertas y ventanas y colocar un sistema de
alarma ayuda, aunque algunos sistemas no son baratos.